Recep Tayyip Erdogan asistirá el sábado en Alemania al partido de cuartos de la Eurocopa-2024 entre Países Bajos y Turquía, anunció la presidencia turca el jueves, justo después de la llamada a su embajador en Berlín, después de un controvertido gesto de un jugador turco.
Las relaciones entre Alemania y Turquía atraviesan momentos tensos luego de que el defensa Merih Demiral hiciera un signo con las manos vinculado a los ‘Lobos Grises’, grupo de extrema derecha turca, para celebrar uno de sus goles en la victoria contra Austria (2-1) el pasado martes, en octavos.
La UEFA anunció el miércoles la apertura de una investigación sobre el «comportamiento potencialmente inapropiado» de Demiral.
El asunto no tardó en adquirir tintes políticos: «El símbolo de extremistas de derecha turcos no tiene cabida en nuestros estadios», reaccionó en X la ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, que pedía a la UEFA «estudiar sanciones».
Estas declaraciones llevaron a Ankara a convocar el miércoles al embajador de Alemania en Turquía. En respuesta, Berlín convocó el jueves por la mañana al embajador turco.
El presidente Erdogan no reaccionó directamente a la polémica, pero varios ministros y el portavoz de su partido AKP (Partido de la Justicia y del Desarrollo) denunciaron la investigación de la UEFA y la reacción de la ministra alemana.
El ministerio de Relaciones Exteriores turco vilipendió «las reacciones con intereses políticos» y «xenófobas de las autoridades alemanas hacia Demiral».