Fútbol Internacional
Kühn noquea el Leipzig
Juvenil en el Leipzig, ahora en el Celtic, Nicolas Kühn trasladó del césped al marcador y a la clasificación de la Liga de Campeones el entusiasmo del conjunto escocés, que ya se siente un candidato al pase a las eliminatorias de las que se aleja el equipo alemán, al borde del abismo, sin un solo punto en las cuatro jornadas.
Los dos goles del extremo alemán de 24 años, que también surcó las categorías inferiores del Ajax y del Bayern Múnich y que ahora se gana la vida desde la pasada temporada en el club verdiblanco (pagó por su traspaso 3,5 millones de euros hace año y medio al Rapid Viena), lideraron la remontada del Celtic, que se sobrepuso al 0-1 de Baumgartner.
Porque, animado e intenso el partido, el Leipzig tomó ventaja primero. Soportada la presión del Celtic, paso a paso fue más allá. A balón parado, lo transformó en el marcador. El córner lo remató en plancha y de cabeza Cristophe Baumgartner para anunciar a Celtic Park las posibilidades del conjunto alemán, que entonces dispuso de su momento, con dos ocasiones más: un testarazo de Orban, fuera por centímetros, y un remate horrible de Nusa.
Desaprovechada su oportunidad, perdonado el 0-2, sobre todo en la acción del extremo internacional noruego de 19 años, cuyo zurdazo lanzó el balón a las nubes, el Cetic remontó al Leipzig. De repente. Por medio de Nicolas Kuhn.
En el minuto 34, intencionado o no, marcó un golazo. De fuera hacia dentro en su conducción soltó su zurda. Por posición, aparentó un tiro. Por golpeó, pareció un pase. La trayectoria sorprendió a todos. Su rosca rebasó la estirada de Gulacsi, chocó en el poste y entró en la red de la portería del equipo visitante, al que Maeda perdonó después el 2-1.
No lo hizo Kuhn, que anotó el segundo tanto verdiblanco al borde del descanso, en un pase atrás desde la banda izquierda que conectó dentro del área prácticamente en la última jugada del primer tiempo ante la frustración del Leipzig, desaparecido ofensivamente y sobrepasado por su adversario, al que se le abre, visible, el horizonte de la clasificación.
Sus siete puntos en dos jornadas son una suma apreciable para el Celtic, que aún no asegura nada, pero que lo propone para avanzar a las eliminatorias de la máxima competición continental si es capaz de mantener el ritmo productivo en las cuatro restantes jornadas, también con la necesidad de una parada de Kasper Schmeichel cuando reapareció su rival en las estadísticas de tiros a portería, allá por el minuto 63. Un ataque esporádico.
Aún dispuso de otra más. El portero danés, ágil, negó el 2-2 a Baumgartner, cuando resurgían las dudas en el Celtic, que, instantes después, sentenció su segundo triunfo en dos jornadas en un error de Gulacsi. El portero falló al atrapar un balón aparentemente sencillo. Hatate, atento en el área, aceptó el regaló y remató el 3-1 para hundir aún más el Leipzig.