Domenico Tedesco, en la cuerda floja de Bélgica

El consejo de administración de la Federación de Bélgica de fútbol analiza a partir de este jueves el futuro del seleccionador, el alemán de origen italiano Domenico Tedesco, que a base de malos resultados y roces con los jugadores ha perdido el apoyo de los aficionados y el favor del vestuario.

La pregunta en la prensa deportiva belga no es si el técnico debe o no continuar, pues se da por hecho su salida, sino cuándo convendría despedirle, a quién se contratará para el puesto y con qué dinero se pagará a su sustituto.

La Federación busca romper con Tedesco, según el diario local DH Les Sports. Pero la institución atraviesa estrecheces financieras y probablemente espere hasta inicios de 2025 para tomar una decisión sobre el técnico, ya que despedirle ahora costaría 1,45 millones de euros pero en 2025 entraría en su penúltimo año de contrato y la indemnización descendería notablemente, según el diario Sudinfo.

Ese mismo periódico publica este martes en su web una encuesta -no científica- en la que el 86 % de las respuestas abogan por despedir al seleccionador, que en 24 partidos acumula 12 victorias, 6 empates y 6 derrotas y el equipo que heredó como Nº1 del ránking FIFA está a punto de caer del «top-10» de selecciones nacionales.

Bélgica, eliminada de la pasada Eurocopa a la primera de cambio, ha perdido sus cinco últimos partidos contra Francia (2-0), Italia (2-2), Francia (1-2), Italia (0-1) e Israel (1-0). El equipo suma seis derrotas en sus diez últimos partidos y en 2024 ha capturado sólo el 38,1 % de los puntos posibles.

Tras la última derrota de Bélgica contra Israel, Tedesco dijo tener confianza en seguir al frente del equipo y aseguró que confía en sus futbolistas y que los jugadores le apoyan.

Pero medios belgas especializados, como RMC SPORT, sostienen que hay un divorcio entre técnico y vestuario mientras que en la sede de la Federación y en el estadio Rey Balduino de Bruselas, donde suele jugar la selección, han aparecido pancartas con el mensaje «Tedesc’out».

La semana pasada era la web de la radiotelevisión pública belga la que abría una información con el titular: «¿Reemplazar a Tedesco? Sí pero, ¿por quién y por cuánto?».

El seleccionador, que tiene 39 años, llegó al banquillo belga en febrero de 2023, tras haber entrenado al Leipzig y al Spartak de Moscú. Tomó el relevo del español Roberto Martínez, quien durante cinco años cosechó unos números muy buenos, pero ningún título.

Con la salida de Martínez, arrancó también un doloroso pero inevitable éxodo de jugadores a los que se conocía como «la generación de oro» en un pequeño país que nunca había concentrado tanto talento en un terreno de juego, y cuya selección se alzó con el tercer puesto en el Mundial de Rusia 2018.

Eran tiempos en que Bélgica superaba las fases de grupos sin despeinarse, llegaba como uno de los equipos favoritos a los Mundiales y las Eurocopas y soñaba, con argumentos, con un título internacional.

Pero los años han pasado y las tornas han cambiado. Tras el fiasco del Mundial de Catar de 2022, el eterno capitán belga Eden Hazard se retiró, engrosando una lista de ilustres jubilados donde figuran también futbolistas que fueron muy solventes, como Vincent Kompany, Thomas Vermaelen o Marouane Fellaini.

Ya con Tedesco en el banquillo, Thibaut Courtois se enfrentó con el seleccionador y anunció que no volvería a la selección si no cambiaba el técnico; Kevin De Bruyne, con 33 años, está lejos de ser el director de orquesta que maravilló al mundo con su visión de juego y precisión, y Romelu Lukaku, de 31 años, ha perdido eficiencia de cara al gol.

En paralelo, los jóvenes que se han ido incorporando al grupo de los Diablos Rojos, como Jérémy Doku, Alexis Saelemaekers o Loïs Openda, aún no dan el nivel de excelencia que hace algunos años llegaron a ofrecer los veteranos.

Con ese panorama, el ecosistema futbolístico belga ha señalado ya como «caducado» a Tedesco y por los diarios deportivos y las tertulias circulan nombres de posibles sustitutos.

En esos mentideros se escuchan nombres como el del exseleccionador nacional Marc Wilmots; el técnico de La Gantoise, Hein Vanhaezebrouck; el entrenador del Glasgow Rangers, Philippe Clément; el exinternacional francés Thierry Henry (que conoce el escenario porque formó parte del equipo técnico de Roberto Martínez), o el exentrenador del Oporto Sergio Conceição. EFE