El Rayo Vallecano, con el colombiano James Rodríguez titular después de mucho tiempo, sufrió para superar la segunda eliminatoria de la Copa del Rey ante el Unionistas, de Primera RFEF, y lo consiguió (3-2) tras remontar un 0-2.

James, que no cuenta para su entrenador, Íñigo Pérez, en la liga, volvió al equipo inicial del Rayo, que tuvo que emplearse a fondo ante un rival muy combativo.

La contienda entre albinegros y vallecanos arrancó con los de Iñigo Pérez buscando hacer de la posesión y de combinaciones en pocos metros su vehículo para acercarse y amenazar la portería local. El Unionistas, por su parte, trataba de robar y salir muy rápido hacia el área del Rayo, sobre todo por las bandas, teniendo que hacer trabajar de manera constante a la zaga visitante.

Pasito a pasito y poco a poco el conjunto salmantino fue metiendo atrás al equipo rayista, tanto que, en un saque de puerta al cuarto de hora la presión surtió su efecto y Dani Cárdenas, a la desesperada, se quitó el balón de encima, cayendo este en la frontal y siendo introducido de primeras a la meta por Álvaro Gómez, que hacía el 1-0 del encuentro.

Se desataron entonces los de Dani Llácer que, si ya tenían fe antes del inicio, ya se lo creían del todo… y decidieron no parar. Tan solo cuatro minutos después y fruto de una insistencia incansable, una recuperación en un contraataque del Rayo se tradujo en una falta lateral que Jony Arriba puso de manera magistral a la cabeza de Imanol Baz, que firmó el segundo en el luminoso de un enloquecido Reina Sofía.

Lo pasaba mal la escuadra vallecana, incapaz de hacerse con la pelota, sobrepasada por los ataques blanquinegros y sin haber inquietado a Unionistas con más de media hora de juego ya disputada. En esos momentos de zozobra y crisis apareció Óscar Trejo que, tras un robo en tres cuartos de Pedro Díaz, arrancó en jugada individual y consiguió recortar distancias y despertar a los suyos (2-1).

El tanto del argentino permitió al Rayo Vallecano salir casi entero de la tormenta que impuso Unionistas en la primera parte y llegar al descanso con todo abierto cuando por momentos las sensaciones indicaban un resultado más abultado a favor de los locales.

La vuelta de vestuarios mantuvo la tendencia, con los de Iñigo Pérez más metidos y activos pero con los salmantinos manteniendo su idea de irse arriba con presteza en cuanto se hacían con el esférico.

Ya les resultó en dos ocasiones y a punto estuvieron de su tercer gol de la tarde. Rabadán le birló la cartera arriba a Aridane y se fue en velocidad del central canario pero, con todo a favor, definió mal y perdonó a los madrileños.

Esa vida extra no fue desaprovechada por el club vallecano, que pocos minutos después empató el choque con un golazo de Pedro Díaz, con más de media hora restante del tiempo reglamentario.

A pesar de la igualada, el guion no varió, con ocasiones tanto para visitantes, como una falta de James en la frontal bien despejada por Coronas, como para locales, con un remate en el punto de penalti de Álvaro Gómez que repelió Aridane.

Acto seguido a un periodo en el que se enfrió todo, el Rayo metió a jugadores más habituales como Jorge de Frutos o Isi Palazón tratando de evitar una posible prórroga. El Unionistas se mantenía entero y seguía acechando la puerta de Cárdenas, pero ya la distancia entre líneas era muy grande, situación que aprovecharon Isi y Embarba para que el extremo madrileño completara la remontada (2-3).