El entrenador del Betis, el chileno Manuel Pellegrini, manifestó este miércoles que su deseo en la Liga Conferencia de fútbol, cuya fase de liguilla cierra jueves en casa ante el HJK Helsinki, es «clasificar» sin importar «en qué puesto», porque «luego hay que pasar las rondas igual».

«No le doy mayor importancia a quién nos puede tocar en la próxima etapa», abundó Pellegrini en la comparecencia que ofreció en la sala de prensa del Benito Villamarín, donde antes dirigió el entrenamiento del equipo.

El técnico santiaguino exigió que sus futbolistas empiecen a «demostrar en el campo para qué están capacitados» en un partido en el que la obligación es «ganar» porque resulta «difícil intentar clasificar matemáticamente si hay que pensar en empatar a uno», el resultado que metería al Betis en los dieciseisavos de final.

Pellegrini recordó que el campeón finés «ya toco en la ‘Europa League'» hace dos años y destacó se trata de «un club grande de su país», lo que se traduce en una mentalidad que «los obliga a salir a ganar», así que si los béticos «creen que es fácil», el encuentro «se complicará».

El entrenador bético eludió la polémica por la ruptura de relaciones entre Betis y Sevilla al indicar que «los derbis» entre ambos cree «le hacen muy bien a la ciudad», ya que se vive «una buena rivalidad deportiva pero si se salen de los márgenes deportivos, es lamentable».

Pellegrini aseguró que estos sucesos «hacen daño; ojalá se solucionen los temas lo antes posible», aunque no quiso expresar una opinión concreta por no haber «visto la celebración» de los jugadores del Sevilla que desencadenaron la denuncia posterior del Betis.

No obstante, el preparador chileno insistió en que «todo lo que es fuera del campo de juego, puede ser una molestia y se tiene que evitar. La rivalidad se vive fuertemente, pero que sea dentro del campo». EFE