Ancelotti medita volver al 4-4-2

Las dudas llevan sobrevolando sobre el Real Madrid desde principios de temporada. El gran arranque del Barcelona, el complicado acople de Kylian Mbappé a un ataque con Vinicius Júnior y resultados decepcionantes tanto en la Champions League como en la Liga desplazaron las miradas a Carlo Ancelotti. El técnico italiano, con la consecución de la Copa Intercontinental y las recuperaciones que ha logrado en lo doméstico y en lo europeo, había hecho remitir un poco las voces críticas estas semanas.

Pero, entonces, llegó el ‘Clásico’ de la final de la Supercopa de España. El Barcelona de Hansi Flick pasó por encima de su idea de juego con los mismos conceptos que en la primera vuelta de Primera División, cuando ya le ganó por 0-4. Esta vez, celebró un 2-5 fruto de la misma confianza en la presión alta, aunque con más reservas que en el Santiago Bernabéu, de un físico inagotable y de unos Raphinha o Lamine Yamal en estado de gracia.

La contundente caída, eso sí, estuvo más bien marcada por la debilidad de los blancos en defensa. La apuesta del club, el verano pasado, se centró en poblar la línea ofensiva de estrellas con el esperado fichaje de un ‘9’ que, acompañado por el The Best 2024, por Rodrygo Goes y resguardado por un Jude Bellingham cuya calidad quedó contrastada la campaña pasada, apuntaba a dominar el planeta fútbol con descaro.

Ahora, tal y como explica Mario Cortegana en ‘The Athletic’, Carlo Ancelotti está replanteándose esta doctrina de sacar de inicio tanta artillería. Está sopesando, en línea con sus ayudantes y con la directiva, dejar a algunos de sus ‘cracks’ en el banquillo próximamente para volver a un 4-4-2 más tradicional que garantice más escudo en la retaguardia. Esto implicaría desplazar a Fede Valverde y a Bellingham a los costados.

El principal llamado a sufrir una venida a menos en lo que a minutos se refiere es Rodrygo, que ya ha sugerido, en varias ocasiones, que piensa que atesora el nivel suficiente para que se le conciba a la par que su compatriota Vinicius o Mbappé. Su jefe valora mucho sus esfuerzos, sobre todo su sacrificio defensivo, como se vio en Arabia Saudí, cuando ayudó a Lucas Vázquez a proteger su lateral. Aun así, no puede evitar pensar que sus compañeros son más peligrosos para el rival.

Otro ‘quid’ de la cuestión reside en Raúl Asencio. El canterano ya debutó hace tiempo con el sénior y ha convencido a mulitud de aficionados y analistas, pero su entrenador sigue optando por Aurélien Tchouaméni para el eje de la zaga a pesar de que no es un especialista. Él y el resto del banquillo ‘merengue’ piensan, de todos modos, que no era lo ideal arriesgarse a sacarle de inicio frente al Barcelona por su falta de experiencia.

‘The Athletic’ adelanta que, próximamente, el joven debería disfrutar de un aumento gradual de su presencia sobre el tapete, lo que quizás implique más suplencias por parte del francés o su devolución a la zona medular. En el seno de Concha Espina, son consciente de las numerosas diatribas que se han estado dirigiendo tanto contra el galo como contra Lucas después de sus actuaciones en el King Abdullah.

El relato de Mario Cortegana tiene mucho sentido, pues las últimas informaciones de la prensa nacional apuntaban a que el Real Madrid respalda a Carlo Ancelotti para, como mínimo, terminar la temporada. Algunas reuniones para estudiar la situación implican el contexto perfecto para que, ahora, salga a la luz que los estrategas de Valdebebas han ideado una fórmula para reconducir una campaña en la que, eso sí, el ‘Septete’ ya está descartado. (Besoccer)