Fútbol Internacional
Girona asalta la séptima plaza con goles de Abel Ruiz y del colombiano Asprilla
El Girona asaltó este lunes la séptima plaza de LaLiga EA Sports al ganar a la Unión Deportiva Las Palmas por 2-1 en el último partido de la 22ª jornada de la competición, con goles de Abel Ruiz y de Yáser Asprilla que sirvieron para poner fin a la peor racha rojiblanca de la temporada.
El cuadro de Míchel Sánchez dejó atrás las derrotas contra el Sevilla, el Milan, el Rayo Vallecano y el Arsenal y se situó a un solo punto de la sexta posición, gracias a un triunfo que disfrutó desde el palco el centrocampista brasileño Arthur Melo, que ha llegado cedido a Montilivi para paliar la ausencia de un centrocampista creativo y para dar un salto de calidad a un equipo que sueña con volver a Europa.
El conjunto de Diego Martínez, por su parte, recortó distancias en el tramo final por mediación de Fábio Silva y aspiró al empate, pero sufrió la cuarta derrota en cinco partidos y continúa sin saber ganar este 2025: ya solo tiene dos puntos sobre las posiciones de descenso.
El duelo comenzó con un susto visitante que acabó de enfriar Montilivi, un remate de Fábio Silva que acabó en córner después de un error de Juanpe Ramírez en la construcción de la jugada, pero el Girona pronto se hizo dueño de la pelota. Y a los ocho minutos consiguió un gol balsámico, para coger aire.
Yangel Herrera, una de las seis novedades en el once de Míchel, envió un gran balón a la espalda de la zaga canaria y Abel Ruiz entró solo en el área por el vértice y superó a Jasper Cillessen con un remate ajustado a su palo izquierdo. Las Palmas reclamó fuera de juego, pero no lo hubo porque lo rompía por mucho Andy Pelmard, señalado en su debut como titular.
El cuarto tanto del curso del ‘9’ rojiblanco supo a liberación después de tantos semanas de críticas sobre su aportación y runrún sobre su figura.
Justo después Abel Ruiz pudo firmar su primer doblete con la camiseta del Girona tras recibir un gran centro de Viktor Tsygankov en la frontal del área pequeña, pero Álex Suárez desvió su remate lo justo para negarle el gol. El cuadro catalán combinaba y llegaba a tres cuartos con mucha facilidad, ante un rival que no sabía conectar con Fábio Silva, demasiado solo.
El Girona coleccionó llegadas claras para doblar su ventaja y encarrilar el encuentro, pero le faltó acierto para conseguir lo que mereció. Pudo marcar Bryan Gil con una preciosa volea y Mika Mármol fue providencial: desvió un pase de la muerte de Miguel Gutiérrez, excelente, cuando Tsygankov ya se relamía.
Pero la ocasión más clara llegó desde los once metros, en un penalti señalado a instancias del VAR por un golpe de Scott McKenna sobre Herrera. Ya en el tiempo añadido de la primera parte Abel Ruiz cogió la pelota para completar su redención, pero su disparo a la derecha se estrelló contra los guantes de Cillessen, salvador.
El equipo visitante, inofensivo en la primera mitad, regresó de los vestuarios con una marcha más que su rival y comenzó a inquietar. Alberto Moleiro se acercó al gol dos veces tras combinar Fábio Silva, pero en la primera Gazzaniga atajó sin problemas su remate y en la segunda, más franca, disparó arriba.
Sufrían los locales, muy incómodos en el primer cuarto de hora del segundo acto: Miguel perdió la posesión cerca de su área y Fábio Silva se plantó ante Gazzaniga, pero no supo resolver.
Míchel intentó recuperar la iniciativa y el terreno perdido con Yáser Asprilla y Cristhian Stuani y Diego Martínez hizo debutar al mediocentro gallego Stefan Bajcetic, cedido por el Liverpool. Moleiro volvió a disparar arriba y el técnico del Girona volvió a actuar: Jhon Solís, mediocentro, entró por Tsygankov, extremo, en un movimiento inequívoco para asegurar el triunfo.
Pero el cuadro local halló el 2-0 cuando parecía priorizar el 1-0, en el minuto 79: Stuani le dejó un balón de cara a Asprilla para que marcara con un duro disparo cruzado al primer toque.
Las Palmas quemó las naves con Jaime Mata y Oli McBurnie y resucitó en el 82′, en una falta. Mika Mármol recibió la pelota en el segundo palo y la envió al área pequeña. Fábio Silva solo tuvo que empujarla para situar el 2-1. La igualada pudo llegar justo después, pero el disparo de McBurnie se fue rozando el palo izquierdo de Gazzaniga. Montilivi sufrió, pero pudo celebrar una victoria muy, muy valiosa.