Connect with us

Fútbol Internacional

El torneo más esquivo del Atlético

Publicado

 

Al término del derbi de la Liga de Campeones contra el Real Madrid, Diego Simeone, el entrenador del Atlético de Madrid, saltó al terreno de juego para pedir el reconocimiento absoluto de la afición para sus jugadores, exhausto tras 150 kilómetros recorridos, derrotados, otra vez enfrentados a la competición más esquiva, ahora tan lejana, fuera de las semifinales desde hace ocho años y otra vez a las puertas de los cuartos.

Desde 2016-17 no llega hasta la penúltima instancia de la Champions, cuando también cayó contra el Real Madrid, cuando también lo puso contras las cuerdas con un 2-0 a toda velocidad en el Vicente Calderón, tras el 3-0 en contra del encuentro de ida en el Santiago Bernabéu.

Desde entonces, cayó tres veces en cuartos (dos de las cuatro últimas), tres en octavos y dos en la fase de grupos. Lo ha eliminado el Borussia Dortmund en 2023-24, el Manchester City en 2022-23, el Chelsea en 2020-21, el Leipzig en 2019-20 y el Real Madrid, tanto en aquel 2016-17 como ahora.

En toda la historia del máximo torneo europeo, nadie ha disputado tantas finales -tres- sin ser campeón. Nadie ha estado tan cerca tantas veces sin haber conquistado el trofeo. En 1974, hasta el último instante de la prórroga contra el Bayern Múnich, luego ganador en el fugaz duelo de desempate; en 2014, en Lisboa, hasta el minuto 93 contra el Real Madrid, luego vencedor en la prórroga; y en 2016, en Milán, hasta el último penalti contra ese rival.

Hay diferencias sustanciales entre las eliminaciones con el Leipzig, el Chelsea y el Borussia Dortmund, entre las más recientes, y la sucedida este miércoles, cuando llevó al Real Madrid al límite, lanzado por el gol a los 27 segundos de Conor Gallagher; dispuso de ocasiones para vencer, apenas permitió nada en ataque al conjunto blanco, cuya única ocasión fue un penalti a las nubes de Vinicius Júnior, y cayó en los penaltis, entre la polémica que surge por el lanzamiento marcado y anulado por el VAR a Julián Alvarez, por haber tocado dos veces en el golpeo por un resbalón.

«Estoy orgulloso de mis jugadores porque competimos de una manera ejemplar en los dos partidos. Estoy contento porque hay dos formas de irse a dormir. Una es cuando no das la talla y no compites y otra es cuando das todo y juegas y compites de forma admirable. Nosotros hemos competido de forma admirable y es para estar contentos», proclama Diego Simeone, cuyo equipo manejó diferentes registros en la vuelta para desfigurar al Real Madrid.

El Atlético reduce al Madrid a 3 tiros a portería en 2 horas

Imponente en defensa, en su repliegue compacto después del gol de Gallagher, redujo al Real Madrid a apenas tres remates entre los tres palos. Uno en la primera parte, otro en la segunda y uno más en la prórroga. A las manos de Jan Oblak. El conjunto blanco promedia 6,58 tiros entre los tres palos en esta Liga de Campeones. Se quedó en tres.

Lo rebajó a la mitad. Sólo tiraron Rodrygo, Lucas Vázquez y Brahim Díaz. Ni Kylian Mbappé ni Vinicius, que mandó la única ocasión de verdad del equipo de Carlo Ancelotti, mediante un penalti, un metro por encima del larguero de la portería del fondo sur del estadio Metropolitano. Fue uno de los cuatro remates fuera de todo el equipo. Hubo también tres bloqueados. Sumó 10 intentos en total, cuando promedia 15,58. Mérito del ajustado plan rojiblanco.

El Atlético le entregó el balón, pero no le permitió ni una sola oportunidad. Los récord del Real Madrid esta campaña en cuanto a presencia o acciones en el último tercio del campo, registrados precisamente este miércoles, se quedaron en una expresión mínima dentro del área, frente a las tres líneas del equipo rojiblanco, con reivindicaciones de Reinildo Mandava -sin balón- y Conor Gallagher, fuera del once tipo del técnico argentino desde hace tiempo.

El lateral izquierdo mozambiqueño no había dispuesto de ningún minuto en los últimos tres choques. Ni en el 1-0 con el Getafe ni en el 2-1 con el Real Madrid ni en el 1-0 al Atheltic. Y de sólo 92 minutos en los últimos ocho, al entrar tres veces desde el banquillo. Únicamente había jugado como titular uno de los últimos once duelos.

Lo mismo, prácticamente, ocurría con Conor Gallagher. En el pasado entre los once más habituales de Simeone, su sitio ya no era tal en la alineación tipo, superado en las preferencias del técnico por Samuel Lino en ocho de los nueve lances anteriores, con la única excepción de las semifinales de la Copa del Rey contra el Barcelona. Hasta este miércoles, cuando irrumpió en la titularidad y completó quizá su mejor partido con el Atlético, con su tercer gol.

El cuarto partido con más paradas de Courtois en la ‘Champions’

No sólo fue inabordable en defensa casi siempre el Atlético en el derbi, sino que fue más allá: en el contragolpe, en las transiciones rápidas, en el ataque con suficiente constancia y claridad como para haber marcado más goles. Este miércoles conectó ocho remates entre los tres palos, cuando su media en esta edición del torneo es de 4,7, casi la mitad, y contó 17 intentos (siete fuera y dos bloqueados, además de los ocho a portería). Su media es 12,2.

Y provocó, al mismo tiempo, la mayor cantidad de paradas de Thibaut Courtois en esta edición de la Liga de Campeones, con hasta siete intervenciones. La media es 4,25.

Desde 2022, en la final de la Liga de Campeones ante el Liverpool, con triunfo por 0-1; en la semifinal con el Manchester City, con victoria por 3-1 en la vuelta en Madrid, y en los octavos de final con el París Saint Germain, con derrota en la ida por 1-0, su equipo no había necesitado tantas intervenciones del guardameta belga, con nueve.

De hecho, son los únicos tres partidos en toda la carrera de Thibaut Courtois con el Real Madrid en la Liga de Campeones, según datos de ‘Be Soccer Pro’, que rebasan la cantidad de aciertos que necesitó este miércoles contra el Atlético; prueba también del expresivo rendimiento ofensivo del Atlético, con Julián Alvarez, con hasta tres ocasiones, y compañía enfrente, repelidos por las paradas del portero de dos metros.

La sensación del vestuario del Atlético es que el equipo fue mejor que el Real Madrid. Tanto en la ida, cuando su control fue exhaustivo desde el minuto 20 hasta el 2-1 de Brahim Díaz, aunque sin profundidad ni riesgos (sólo conectó dos remates a portería en los primeros 93 minutos y 49 segundos de la serie en el Bernabéu), como, sobre todo, la vuelta, cuando fue doblegado en los penaltis. Su octava tanda en la historia en Europa. La quinta perdida.

El análisis de Jan Oblak es concreto: «Al final es una cosa, es suerte. Ellos la han tenido y nosotros no. Es una explicación fácil. Hemos hecho un buen partido, pero al final ha faltado este poquito de suerte que ellos han tenido y nosotros no. Cuando a veces pasa que el jugador lanza un penalti y a lo mejor toca dos veces, el portero se va para otro lado y el balón igualmente entraría… Al final es así. La única explicación es suerte». EFE

TABLA LIGA NACIONAL

Derechos Reservados © 2024 Diario Deportivo MÁS, Honduras Centro América. Politica de Privacidad