El agente de Gerard Piqué, Arturo Juan Canales, ha respaldado al exjugador ante la jueza que le investiga, a quien ha explicado que llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí fue un «mérito deportivo fantástico», y ha defendido la fórmula alcanzada con la Federación de Fútbol para garantizar la comisión de Piqué.

Este agente y amigo «íntimo» del exjugador blaugrana -como él mismo se ha definido- ha comparecido en calidad de testigo ante la titular del Juzgado de Instrucción 4 de Majadahonda (Madrid), que investiga el contrato firmado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la entidad saudí SELA para llevar la Supercopa a Arabia Saudí.

A lo largo de su interrogatorio, el testigo ha respaldado la versión de Piqué, a quien ha dicho que asesoraba y de cuya empresa, Kosmos, es socio y también asesor, según informan a EFE fuentes jurídicas.

En línea con la declaración de Piqué -investigado junto al expresidente federativo Luis Rubiales-, el testigo ha explicado que el exfutbolista hizo un contrato con SELA y no con la Federación, y que el encargo de la entidad saudí era para que actuase «de agente intermediario». Ha manifestado que «inicialmente» él no participó en el asunto de la Supercopa, ni en la negociación del contrato ni antes ni después.

«En Kosmos no tenemos mandato de la Federación, tenemos mandato de SELA», ha subrayado y ha defendido el formato que se dio a la Supercopa: tener un partido en Arabia Saudí que puedan disputar dos equipos españoles como el Real Madrid y el Barça «es un mérito deportivo fantástico», según las fuentes.

También ha respaldado la cláusula del contrato entre SELA y la RFEF por la que esta última «trataba de garantizar» que la empresa saudí abonaba la comisión de 4 millones de euros anuales que se pactó en favor de la empresa de Piqué como intermediario en el negocio.

Era, ha dicho el agente, una fórmula para garantizar el cobro de la comisión que a la RFEF no le costaba nada incluir porque iba a cobrar mucho dinero, explican las fuentes consultadas.

El agente ha elogiado la «credibilidad» que aportaba Piqué en las negociaciones y ha señalado que SELA era un cliente difícil de acceder porque «tiene muchos millones y no abre la puerta a cualquiera», según las fuentes.

Tras él ha comparecido un segundo testigo, que ha explicado que otro de los investigados, el amigo de Rubiales y exfutbolista Francisco Javier Martín Alcaide, Nene, le pidió asesoramiento para invertir en criptomonedas en 2022 y le dio, junto a otras dos personas, 60.000 euros en metálico a partes iguales para el negocio.

Él, ha dicho, no les dio ningún recibo porque era una relación de confianza. Guardó dos semanas el dinero en su casa y después realizó la inversión en Madrid y fue informando a los inversores, si bien al final, «con las subidas y bajadas», no obtuvieron beneficios, apuntan las fuentes.EFE